
Sam (Corey Haim) y Michael Emerson (Jason Patric) son dos jóvenes americanos muy convencionales. Tras el divorcio de sus padres, se instalan en la tranquila ciudad de Santa Carla (California), donde corren rumores sobre vampiros. La personalidad de Michael cambia sensiblemente y empieza a ir con una banda de moteros cuyo líder es el carismático David (Kiefer Sutherland). Obviamente, a su madre no le gustaría ver en qué se está convirtiendo.